Alerta máxima para los usuarios de Banamex: deben tener cuidado si realizan estas transferencias

Cuando realizas una transferencia bancaria, es común sentir inseguridad hasta que el destinatario confirma la recepción del dinero. Aunque los sistemas electrónicos suelen ser confiables, siempre existe el riesgo de errores humanos o fallos informáticos que impidan que el dinero llegue correctamente a su destino o termine en otra cuenta.

Por eso, es fundamental hacer un seguimiento de la operación y conocer bien cómo funciona el sistema de transferencias. El tiempo que tarda en reflejarse depende del tipo de transacción: una transferencia electrónica tradicional puede demorar entre 1 y 2 días hábiles, mientras que una transferencia SPEI suele completarse en cuestión de segundos.

No olvides que si haces el envío fuera del horario laboral de tu banco o durante el fin de semana, la operación no se procesa hasta el siguiente día hábil. Este tipo de detalles puede generar demoras inesperadas que muchas veces causan preocupación en el remitente.

¿Qué son las transferencias SPEI?

El sistema SPEI (Sistema de Pagos Electrónicos Interbancarios) es administrado por el Banco de México y permite transferencias inmediatas entre bancos. Para utilizarlo, necesitas tener banca móvil o en línea habilitada, la CLABE interbancaria del destinatario, y seguir los pasos que tu banco te indique. Entre enero y noviembre de 2023, se realizaron más de 3,271 millones de transferencias SPEI en México.

Proceso de una transferencia bancaria

El proceso de una transferencia SPEI incluye comprobaciones de seguridad, la verificación de la operación por parte del banco emisor, y la recepción de los fondos por parte del banco del beneficiario.

Al final del proceso, recibirás un Comprobante Electrónico de Pago (CEP), el cual debes guardar para cualquier aclaración futura. Banxico recuerda que las transferencias entre cuentas del mismo banco no pasan por el sistema SPEI, por lo que su comportamiento puede variar.

El aviso de Banxico por las transferencias

Una advertencia importante es sobre las llamadas “transferencias fantasma”, un tipo de fraude detectado por la Condusef. Estas aparentan ser reales y pueden incluso reflejarse en el historial de movimientos, pero en realidad no se efectúan. Los estafadores usan técnicas como phishing o malware para engañar al sistema y desviar el dinero a cuentas fraudulentas.

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En estos casos, las víctimas pueden recibir notificaciones y ver movimientos en su cuenta, pero el dinero nunca llega al destinatario correcto. Por ello, es esencial verificar siempre el origen de cualquier transferencia sospechosa, evitar compartir tus datos bancarios y consultar con tu banco si detectas alguna irregularidad. Mantenerse informado y alerta es la mejor defensa contra estos fraudes.

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