El día que Javier Aguirre perdió los papeles en la Copa Oro

Javier Aguirre cumplió con los deberes e instaló a México en la ronda de cuartos de final de la Copa Oro. El seleccionador nacional va en busca de su segundo título del torneo CONCACAF, recordando el que ganó en la edición del 2009. Dicho certamen quedó marcado por la terrible agresión que Aguirre proporcionó a un futbolista panameño en la fase de grupos.

México venía de una victoria de 2-0 contra Nicaragua y ante Panamá se jugaba asegurar la clasificación a la siguiente ronda. El partido que se desarrollaba en el Reliant Stadium de Houston estaba empatado 1-1, y a poco más de 10 minutos de que se decretara el empate, Javier Aguirre desató una bronca como pocas veces se ha visto.

El futbolista panameño Ricardo Philips disputaba un balón en la banda con Fausto Pinto. Dicha banda era la de la zona donde se ubican los directores técnicos, y de un momento a otro Aguirre lanzó una patada al adversario. El panameño reaccionó y empujó al ‘Vasco’ y de inmediato se formó la trifulca.

El entrenador fue expulsado, junto a los jugadores Luis Noriega de México, Armando Gun y el propio Ricardo Philips. La violenta maniobra le costó tres partidos de suspensión, y lo que en otras circunstancias hubiese sido la baja definitiva del combinado nacional, mantuvo su puesto debido a que la Copa del Mundo estaba a un año de jugarse.

“Los regañé, porque tuve que dar una patada que ellos no se atrevieron a dar en el campo. Puse el ejemplo, mal, pero se los puse. Tenía los ojos inyectados de sangre, nos estaban comiendo el terreno”, confesaría años después el entrenador sobre lo que lo orilló a cometer tal acto.

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